¿Cómo promover el amor por la naturaleza desde casa?


A veces pensamos que para que un niño ame la naturaleza tiene que hacer una excursión al bosque o visitar un parque natural cada fin de semana. Pero la verdad es que el amor por la naturaleza empieza en lo pequeño, en lo cotidiano, y sobre todo... en casa. 🐛🍃

En el enfoque Montessori, la conexión con la naturaleza no es un extra, sino una necesidad vital. María Montessori lo decía con claridad: “No podemos enseñar nada a los niños. Solo podemos ayudarlos a descubrirlo por sí mismos”. Y no hay mejor espacio para descubrir que el mundo natural. 🌼


🍂 ¿Por qué es importante este vínculo?

Cuando los niños se relacionan con la naturaleza:

  • Desarrollan empatía hacia otros seres vivos (plantas, animales, insectos).

  • Fortalecen su curiosidad y capacidad de asombro.

  • Se sienten parte de un todo, lo que favorece su bienestar emocional y les da una base sólida para cuidar el planeta.

Y lo mejor es que no necesitamos una granja o una selva para lograrlo. Solo un poquito de intención, unos ojos curiosos… y a veces, una lombriz que aparece en la maceta. 😄


🌱 ¿Cómo sembrar este amor desde casa? Actividades Montessori con ejemplos claros

1. Crear un pequeño huerto o jardín, aunque sea en una maceta

Permitir que el niño siembre, riegue y observe el proceso de crecimiento es una forma poderosa de conexión.

Ejemplo Montessori:
Coloca una maceta a su altura, con tierra y semillas comestibles como albahaca, rabanitos o tomates cherry.
Invítalo a regarlas cada mañana y observar los cambios.
Comenta con él: “¡Mira cómo creció hoy tu planta! Parece que le gustó el agua que le diste ayer”.

Este cuidado diario desarrolla la paciencia, la observación y el respeto por los ciclos naturales.


2. Explorar el jardín, la vereda o incluso una maceta como si fueran una selva mágica

El método Montessori invita a la observación consciente. No se trata solo de ver, sino de mirar con atención, con todos los sentidos.

Ejemplo:
Sal con tu hijo a buscar “tesoros naturales”: una hoja caída, una piedra curiosa, una flor silvestre.
Luego, colóquenlos en una “mesa de naturaleza” dentro de casa.
“¿Cómo huele esta flor? ¿Sientes la textura de esta corteza?”

Crear un pequeño altar natural con los hallazgos dignifica la naturaleza y despierta la atención plena.


3. Tener animales pequeños (si es posible) o cuidar insectos y observar su comportamiento

Montessori hablaba del valor de los animales para cultivar la responsabilidad y la compasión.

Ejemplo Montessori:
Si tienen espacio y tiempo, cuidar de un pez, un hámster o incluso observar caracoles o hormigas en el jardín.
“Este pez depende de ti. ¿Lo alimentamos juntos hoy?”

Y si no se pueden tener animales en casa, también vale ver documentales breves juntos, leer cuentos sobre animales y hablar de cómo viven en su entorno.


4. Leer cuentos y libros que valoren la vida natural

El lenguaje es una puerta al amor. Escoger cuentos que hablen de la naturaleza con ternura y respeto nutre su corazón.

Recomendaciones de cuentos Montessori-amigables:

  • La pequeña oruga glotona

  • El árbol generoso

  • Yo soy el agua

  • Adivina cuánto te quiero (con su entorno natural lleno de vida)

Después del cuento, pueden dialogar:
“¿Te gustaría vivir en ese bosque?”
“¿Qué animal te gustaría ser hoy?”


5. Permitir que se ensucien, exploren, se mojen con la lluvia o toquen la tierra

En Montessori, el contacto directo es clave. La naturaleza no se enseña en abstracto. Se vive con el cuerpo, con los pies descalzos, con las manos embarradas.

Ejemplo lúdico y real:
Días de lluvia: déjalo caminar por los charcos con botas (o sin ellas).
Días de sol: juega a buscar formas en las nubes, a tender la ropa juntos, a recolectar hojas.

La experiencia directa crea una memoria emocional positiva con la naturaleza.
Si el niño se siente libre, respetado y feliz en contacto con la tierra, querrá protegerla siempre.


🧩 Actividades prácticas para distintas edades

EdadActividadBeneficio
2-3 añosRegar plantas con una regadera pequeñaCoordinación, cuidado
3-4 añosObservar insectos con una lupaCuriosidad, atención plena
4-5 añosArmar una “mesa de estaciones” en casaRitmo natural, conexión emocional
3-5 añosPintar con elementos naturales (flores, hojas)Creatividad, exploración sensorial
TodasEscuchar sonidos de la naturaleza (grabaciones o en vivo)Relajación, conciencia auditiva

💚 Porque cuidar empieza por amar... y amar empieza por conocer

En Montessori no se enseña a “cuidar el planeta” como una obligación. Se cultiva el amor profundo por cada flor, cada insecto, cada gota. Y ese amor surge cuando el niño se siente parte de ese mundo natural, no espectador de él.

Así que cuando tu hijo camine descalzo por el pasto, acaricie una hoja o le hable a su planta favorita, sonríe. Porque allí empieza el respeto que durará toda la vida.


📌 ¿Te gustaría seguir explorando cómo aplicar estos principios en casa?

Te invito con mucho cariño a visitar nuestra página:
👉 www.juvenalperez-bonaparte.com
Allí encontrarás nuestras guías prácticas Montessori, diseñadas para que puedas acompañar a tu hijo en su crecimiento desde el amor, la conexión y la libertad.

Y si tienes dudas, anécdotas o quieres compartir cómo vives tú este vínculo con la naturaleza en familia, escríbenos en nuestro blog:
👉 https://montessoriencasaconjuvenal.blogspot.com

Recuerda: no hay infancia sin naturaleza… ni naturaleza sin infancia que la ame. 💚🌱

Comentarios

Entradas más populares de este blog

“¿Tu hijo se aburre aunque tenga mil juguetes? No es él… es el exceso.”

¿Cómo puedo ayudar a mi hijo/a con los problemas escolares desde casa?

“¿Por qué mis papás no están juntos?”